Greenpeace está de campaña por la calidad del aire en la Ciudad de Buenos Aires. Activistas escalaron 23 metros de altura y le pusieron una máscara de oxígeno a la famosa estatua de la república en la Plaza del Congreso. Exigen aire limpio y un transporte público basado en energías renovables.
¿Buenos? Aires, se pregunta la organización ambientalista luego de confirmar que la contaminación del aire en la ciudad supera los valores establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además denuncia que el sistema de medición de calidad del aire liderado por el gobierno porteño es insuficiente y deja por fuera contaminantes que representan un riesgo medioambiental para la salud.
Por eso militantes de Greenpeace escalaron el monumento de los dos Congresos en la ciudad de Buenos Aires para exigirle al gobierno que se ubique “del lado de la salud de los ciudadanos”.
Ingo Boltz, coordinador de la campaña de Contaminación de Aire de Greenpeace, dijo que “mientras el transporte público dependa de la quema de combustibles como el gasoil, respirar en la ciudad es una amenaza para todos”. Según Greenpeace, el gobierno cuenta solamente con tres estaciones de medición, cuando debería contar con 10 o más. Además, dice la organización, el sistema que mide el aire en la Ciudad deja por fuera contaminantes que representan un alto riesgo para la salud.
“Los combustibles de los vehículos motorizados, principalmente el de los colectivos, generan tóxicos perjudiciales para la salud. Entre los contaminantes dañinos se encuentra el dióxido de nitrógeno (NO2) y Materia Particulada (MP10 y MP2.5) que provocan enfermedades cerebrovasculares, cáncer de pulmón, enfermedades pulmonares e infecciones respiratorias, como la neumonía, entre otras”, señaló Boltz.
Ante este panorama, la organización ambientalista junto al Instituto de Química Física de los Materiales, Medio Ambiente y Energía (INQUIMAE) de la Universidad de Buenos Aires y el Conicet-CSC emprenden una investigación para medir la composición del aire y sus niveles de contaminación en la ciudad. El estudio contará con la participación de los ciudadanos porteños en múltiples puntos de la ciudad.